Hoy, en el blog de Satrack, nos detendremos en una de las claves para optimizar el transporte logístico: los tipos de cargas.
¿Qué son y qué importancia tienen? ¿Cómo se clasifican?
Te compartiremos también algunos tips para mejorar el transporte de cargas de nuestra empresa.
¡Comencemos!
Se denomina tipos de carga logística a la clasificación y agrupación de productos realizada para manipular y transportar mercancías en los procesos logísticos. Para esta categorización, se tiene en cuenta la naturaleza de los productos a transportar y sus necesidades para así obtener una manutención eficiente de los mismos hasta el momento de la entrega. La importancia de una correcta clasificación de cargas radica, por un lado, en conservar las mercancías en su estado original y resguardarlas de que sufran cualquier tipo de daño o rotura. Por otro lado, es fundamental para garantizar el cumplimiento de los tiempos de entrega de mercancías, agilizando las tareas de carga y descarga, y velando también por la seguridad del personal de trabajo.Así mismo, una buena clasificación permitirá reducir el número de pasos necesarios en la cadena logística, generando también un notable ahorro en materia económica. Un buen trabajo en el área de clasificación de la carga, entonces, traerá los siguientes beneficios:
- Mayor seguridad para la mercancía y el personal
- Optimización de tareas de carga y descarga
- Notables mejoras en los tiempos de entrega
- Reducción de costos en materia logística
¿Qué tipos de cargas existen?
Ahora que ya sabemos que significan los diversos tipos de carga en logística, y cuál es la importancia de un buen trabajo en dicha área, es importante conocer los distintos grupos en que podemos clasificarlas según sus características y cómo se debe trabajar con cada uno de ellos.
CARGA GENERAL
Se llama así a las cargas que pueden movilizarse en pequeñas cantidades o, incluso, individualmente. Habitualmente, son contabilizadas según la cantidad de bultos y, con el embalaje adecuado, son fáciles de manipular. Los tipos de carga general puede ser divididos en dos subcategorías:
Carga fraccionada: cuando las mercancías están separadas individualmente, y se manipulan por unidad agrupandolas en cajas, paquetes u otras formas de almacenamiento.
Carga unitarizada: las mercancías se organizan por tamaño, utilizando pallets o contenedores para su unificación.
CARGA A GRANEL
Se denomina “carga a granel” a aquellas mercancías movilizadas en grandes cantidades sin embalaje ni empaquetado alguno, y que son transportadas en contenedores específicos amarrados al medio de transporte en cuestión. Puede ser categorizada de dos maneras diferentes según las características de la mercancía:
Carga a granel líquida: transportadas en tanques o en depósitos diseñados específicamente para almacenar líquidos, este tipo de cargas precisan un especial cuidado para su movilidad y puede abarcar sustancias como el petróleo, el gas natural u otros productos químicos.
Carga a granel sólida: habitualmente, este tipo de cargas sólidas es despachada en su lugar de origen y son transportadas en grandes contenedores hasta su destino. Diversos granos, como el trigo o el maíz, o minerales como el carbón, son ejemplos claros de productos sólidos.
CARGA PERECEDERA
Aquí, la mercancía transportada se diferencia por tener un determinado tiempo de vida útil, lo que provoca la necesidad de cumplir a la perfección los tiempos de entrega, y además precisar condiciones específicas para su correcta conservación, como puede ser la temperatura o la protección de otros factores externos. Las cargas perecederas más comunes son productos alimenticios como la carne, frutas, verduras o productos lácteos, así como también otros como las flores.
CARGA FRÁGIL
Tal cual su nombre lo indica, las cargas frágiles son llamadas así por tratarse de productos débiles y endebles, propensos a quebrarse o dañarse ante cualquier impacto que puedan recibir. Por eso, es importante que estos productos cuenten con formas adicionales de protección, como doble embalaje, plástico de burbujas o protección de espuma, para así asegurarse que lleguen en perfectas condiciones a su destino. Al mismo tiempo, debemos tener un cuidado especial a la hora de manipularlos, evitando los movimientos bruscos.
CARGA PELIGROSA
Se denomina carga peligrosa a aquellas mercancías qué por sus propiedades específicas pueden causar daños graves tanto a la salud de las personas como al medio ambiente, por lo que se requiere un cuidado extremo para su manipulación y traslado. Las mercancías peligrosas se clasifican, según la Organización de Naciones Unidas (ONU), en 9 categorías:
- Explosivos
- Gases
- Material radioactivo
- Líquidos y sólidos inflamables
- Sustancias tóxicas
- Sustancias infecciosas
- Sustancias corrosivas
- Sustancias comburentes y peróxidos orgánicos
Objetos peligrosos varios
Al trabajar con cargas peligrosas, además de hacerlo con la máxima concentración, es fundamental verificar con anterioridad el correcto funcionamiento de los equipos de seguridad, el estado de cada uno de los embalajes y los transportes y contar con la documentación legal necesaria. Así mismo, es imprescindible señalizar al resto de la población mediante rótulos o carteles que lo que se está trasladando es material peligroso.
CARGA VALIOSA
Piedras preciosas, obras de arte, títulos… Existen determinadas mercancías qué, por su altísimo valor económico, requieren cuidado particular además de documentación específica como seguro de riesgo y más. Estos, además de embalajes de alta calidad, requieren una estrategia previa de logística para evitar robos o daños materiales irreparables.
Tips para mejorar el transporte de los diversos tipos de cargas
Como vimos, una buena gestión de transporte de cargas traerá como resultado grandes beneficios para nuestra empresa. Por eso, nos parece importante compartir algunos consejos que ayudarán a optimizar y agilizar el área:
- Elegir el medio de transporte apropiado según el tipo de carga
- Planificar con anterioridad el recorrido de cada vehículo
- Ubicar correctamente la carga en el vehículo
- Al momento de la ubicación, tener cuenta también el proceso de descarga
- Capacitar constantemente a los conductores (¡más aún en el transporte de cargas peligrosas!)
- Verificar el buen estado de los elementos de seguridad antes de cada viaje
- Monitorear la carga durante todo el trayecto para evitar robos o desvíos innecesarios
Más allá del tipo de carga que tu operación de transporte maneje, ten presente que la reducción de costos y el aumento de la seguridad en ruta dependerá de lo amigable y eficiente que sea la tecnología que uses para el control de tus procesos. Si aún no cuentas con un plataforma de telemetría o te gustaría conocer el alcance de nuestro sistema, sólo diligencia el formulario y te contactaremos.